No me sueltes
no me dejes ahora que piso firme los caminos que me mostraste
hace ya tantos años
hace ya toda una vida
no eres solo un ejemplo
también mi compañero
y aliado
cuando me contabas historias de vida, hambre y revolución
me entregaste respuestas
con ellas también me hiciste soñar
imaginar nuevos mundos
conquistar nuevas utopías
solo puedo culparte de eso
de exceso de motivación
de nostalgia por épocas que no viví
por clamar justicia por aquellos que no conocí
por sentir como propio el dolor ajeno
por unirme al llanto de otros
y levantar de vez en cuando la voz y el cuerpo como parte de la rebelión
no me sueltes ahora que te necesito aquí
conmigo
respetando la dirección en que vuelo
sintiéndome libre y atada al mismo tiempo
con tanto por descubrir
ahora que me reconozco en ti
que mis ideas han tomado forma
se transforman en convicciones
y quizá se te escapan del control
pero no quiero culpas
tampoco que me niegues tu mano
quiero que me quieras por lo que soy
soy lo que fuiste
tan igual como ayer
tan distinta como hoy